El alcalde de la ciudad de Nueva York, Eric Adams, ha defendido la Gran Manzana como un santuario para los inmigrantes, meses después de que dijera que un aumento en la frontera “destruiría” su ciudad.
A la luz de un número récord de encuentros de migrantes en la frontera entre Estados Unidos y México, además de una mayor inacción en términos de seguridad fronteriza tras el fracaso de un proyecto de ley del Senado estadounidense de 100 mil millones de dólares, Adams continúa expresando la necesidad de ayuda federal en abordar lo que se ha convertido en una situación de largo plazo.
“Permítanme decirles algo, neoyorquinos. Nunca en mi vida he tenido un problema al que no le viera un final”, dijo el demócrata en septiembre. “No veo un final para esto. Este problema destruirá la ciudad de Nueva York”.
Pero también acepta ser una ciudad que acoge a los inmigrantes, de los cuales unos 175.000 han buscado refugio en la ciudad de Nueva York desde la primavera de 2022. La mayoría de los inmigrantes que llegan a la ciudad no son delincuentes violentos, añadió, como parte de una nueva entrevista el domingo con WPIX, afiliado de noticias locales.
A principios de este mes, se difundieron imágenes de vídeo de varios inmigrantes atacando a dos agentes de policía de la ciudad de Nueva York. El incidente llamó más la atención cuando el fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, permitió que cinco de los individuos fueran liberados sin derecho a fianza y finalmente abordaron autobuses para, según se informa, abandonar la ciudad por completo.
“No tengo el objetivo de derogar la ciudad santuario, y quiero dejar eso claro”, dijo Adams el domingo al presentador de Pix on Politics, Dan Mannarino. “Mi objetivo es derogar cualquier aspecto en el que las personas participen en conductas criminales, actos criminales violentos.
“No deberían quedarse en nuestra ciudad. No deberían estar aquí cuando uno vive de la benevolencia de los neoyorquinos y del dinero de los impuestos y comete crímenes como los que vimos en Nueva York, en Times Square”.
Este sitio web se comunicó con la oficina del alcalde por correo electrónico para solicitar comentarios.
Cuando Mannarino le pidió que aclarara sus comentarios, Adams reiteró que no tiene intención de revocar el estatus de santuario en general y que no tiene autoridad legal para hacerlo de todos modos si lo intentara.
“El Congreso debe unirse”, dijo Adams. “Creo que los republicanos realmente se han interpuesto en el camino de una verdadera reforma migratoria durante mucho tiempo. Pero ambos lados del pasillo deben hacerlo. Este es un breve resumen.
